La reflexión como MOTOR: ¿Digital versus analógico?
En la actualidad, las TIC irrumpen, en todos los ámbitos, desde el familiar al escolar. Es una realidad que no podemos negar. Pero mi relación actual con el mundo digital y sus usos educativos y creativos es ambivalente.
Trabajo como acompañante y educadora de apoyo en una escuela de educación
viva. Según esta metodología, los niños y niñas de educación infantil necesitan tocar, experimentar, expresarse, crear
vínculo... Todo desde el contacto con los objetos, los materiales, las
propuestas y las personas. Es un tipo de educación que parte de la vivencia y
de la curiosidad, y me apasiona. En esta etapa, no creo que las TIC sean una
prioridad. Aunque también puedan tener un papel.
Además, veo a muchos niños y niñas que a edades muy tempranas hacen un uso excesivo de las pantallas. Tablets,
teléfonos móviles, ordenadores, videoconsolas y un largo etcétera de pantallas
que ocupan sus horas. Y de esta manera les quitan tiempo para jugar, para
relacionarse cara a cara, para conocer las posibilidades motrices y expresivas
de su cuerpo y para otros muchos aprendizajes vitales que han de hacerse en
esta etapa. Y que solo se pueden hacer con la práctica y la vivencia real.
Las pantallas no solo absorben mucho tiempo a los niños y niñas. Eso también pasa con los adultos. Miramos mucho a nuestro teléfono, pero ¿miramos con el mismo interés a las personas que nos rodean?
Por otro lado, he estudiado el Grado de Educación Infantil a distancia, en la VIU y he comprobado que las TIC ofrecen muchas posibilidades para generar procesos de aprendizaje significativo. El trabajo por competencias me parece un acierto.
Además, me encanta escribir. Lo he hecho toda la vida. Y recientemente he creado una página de Facebook para compartir mis relatos. En este caso, las TIC se convierten en una herramienta accesible y fácil para la difusión de un trabajo creativo. De esta manera, las emociones pueden llegar a la gente en forma de palabras: https://www.facebook.com/saramartinezhuertas/
En definitiva, veo que las Nuevas Tecnologías ofrecen luces y sombras, muchas oportunidades y también algunas
limitaciones.
Por este motivo, creo que es importante tener una perspectiva crítica y reflexiva, que ayude a hacer un buen uso de las mismas. No sirven para todo, ni en todos los ámbitos. Pero bien utilizadas pueden generar aprendizajes y experiencias colaborativas significativas.
Antes de pensar en usar las TIC en educación deberíamos reflexionar sobre lo que necesitan las personas en cada una de las etapas vitales. No es lo mismo un niño de 3 años, que uno de 6 o de 12. Nada que ver. También deberíamos reflexionar sobre qué tipo de sociedad queremos construir, qué habilidades pretendemos desarrollar y qué objetivos nos proponemos.
Inicio con ganas el curso “La reflexión como motor de desarrollo de la
Competencia Digital Docente”. Creo que me ofrecerá contenidos, herramientas y
reflexiones que me ayuden a construir una visión fundamentada y crítica sobre
el uso de las TIC como herramienta para educar y generar procesos creativos, comunicativos y comunitarios.
Seguimos aprendiendo…
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